MARÍA ABENZA MEDRANO
BIBLIOGRAFÍA 4 (20/10/11)
Cojuro E, Pérez D. Cambios más relevantes y peculiaridades de las enfermedades en el anciano. En Jiménez MA, Benavent R, Boyano I, Clemencia M, Corujo E, Espaulella J. et al., Tratado de Geriatría para residentes. 1ºed. Madrid: Sociedad española de Geriatría y Gerontología; 2007. p. 747-760.
COMENTARIO: cambios fisiológicos y morfológicos en el anciano
Cambios en la figura corporal
- Mayor delgadez y pérdida de estatura
- El vientre se torna redondeado
- Las piernas y los brazos son más frágiles
Cambios en los signos vitales
- Dificultad de mantener la temperatura corporal
- Mayor sensibilidad a los golpes de calor
- Disminución de respuesta a la reducción de los niveles de oxígeno o al incremento de los niveles de dióxido de carbono.
- Mayor incidencia de hipotensión ortostática
- Menor tolerancia al ejercicio
Cambios en el sistema cardiovascular y sanguíneo
- Disminución de la cantidad de reserva del corazón ante situaciones como: enfermedad, infecciones, estrés emocional, lesiones, esfuerzo físico extremo y ciertos medicamentos
- Mayor incidencia de hipertensión arterial e hipotensión ortostática
- Incremento de problemas aterotrombóicos
- Aparición de diferentes tipos de arritmias
- Aumento en diez veces de a incidencia de insuficiencia cardiaca en personas mayores de 75 años
- Estenosis de la válvula aórtica es la enfermedad valvular más común en las personas de edad avanzada.
- Aparición de anemias en relación con desnutrición, infecciones crónicas, pérdida de sangre en el tracto gastrointestinal o como complicación de enfermedades o medicamentos
Cambios en el aparato respiratorio
- La función pulmonar máxima disminuye
- La cantidad de oxígeno que se transfiere disminuye
- La respiración normal sigue siendo adecuada
- La inspiración y expiración máxima disminuyen, lo que produce una menor tolerancia al ejercicio y a las grandes alturas
- Mayor tendencia al colapso de las vías respiratorias al no respirar profundamente o al permanecer largo tiempo inmovilizado, y con ello más riesgo de desarrollar infecciones respiratorias u otros problemas pulmonares.
- Menor respuesta a la disminución de los niveles de oxigeno y a un aumento de los niveles de dióxido de carbono
- Cambio del tono, volumen y cantidad de la voz al producirse cambios en los cartílagos y musculatura de la laringe; ésta se vuelve mas lenta, débil y ronca
- El reflejo de la tos disminuye y ésta puede ser menos fuerte, lo unido a la lenta movilidad de los cilios y menor secreción de IgA produce una mayor susceptibilidad a las infecciones respiratorias.
Cambios en el aparato intestinal
- En la boca; dificultad para identificar los alimentos por el sabor, defectos en la masticación y, por tanto, reducción de la ingesta calórico.
- En el esófago: Reflujo gastroesofágico, mayor incidencia de hernia hiatal, aumento del número de lesiones gástricas por fármacos y retrasos en el transito.
- En el estómago; Enlentecimiento gástrico que produce predisposición a la anorexia y pérdida de peso, al aumentarse la distensión gástrica y el aumento de la sensación de plenitud y saciedad.
- En el intestino; desnutrición y diarrea por la proliferación bacteriana que produce malabsorción, estreñimiento, incontinencia fecal por alteraciones en la sensibilidad.
- En páncreas; mayor intolerancia a la glucosa
Cambios en los órganos de los sentidos
- Disminución de la percepción, de la memoria y del pensamiento
- En el órgano de la visión se produce una disminución de la secreción lagrimal
- En el oído mayor cantidad de tapones de cerumen
- Disminución del tacto, de la sensibilidad térmica y dolorosa profunda.
Cambios en el sistema nefrourológico
- Dificulta en la capacidad de concentración de la orina puede producir mayor tendencia a la deshidratación, sobre todo la hipernatrémica, debido a la pérdida de la sensación de sed en respuesta a la osmoralidad sérica o a una contracción del volumen
- Disminuye la renina y la aldosterona por lo que hay mayor riesgo de hiperpotasemia, que va a aumentar la acidosis en el riñón.
- Mayor tendencia a las infecciones urinarias por vaciado incompleto de la vejiga y cambios en las mucosas
- Mayor tendencia a la incontinencia por pérdida de tono de la musculatura vesical y alteración en la inervación autónoma
Cambios en el sistema musculoesquelético
- Disminución de la estatura por pérdida de líquido en los discos intervertebrales y del contenido mineral de las vértebras.
- Los huesos se vuelven más porosos y con mayor incidencia de osteoporosis y, por lo tanto, mayor riesgo de fracturas.
- Mayor frecuencia de problemas inflamatorios en las articulaciones con deformidades de las mismas. Tendencia a la flexión de las rodillas y caderas
- El movimiento es más lento y puede verse limitado. La marcha puede volverse inestable con obre balanceo de los brazos. La fatiga se presenta con mayor facilidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario